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El mercado financiero mexicano está cada vez más preocupado por la posible aprobación de reformas polémicas y la incertidumbre electoral en Estados Unidos. Estas tensiones están alimentando la teoría de que el Banco de México (Banxico) no podrá recortar las tasas de interés.
Fuentes del mercado indican que la aprobación de la iniciativa de reforma del Poder Judicial podría disparar el tipo de cambio, especialmente si se mantiene la propuesta original que incluye la elección popular de jueces, magistrados y ministros. Fitch, la calificadora de riesgo, ha señalado esta reforma como un riesgo para el perfil institucional del país.
El temor radica en que una depreciación del peso podría afectar los precios al consumidor, complicando aún más el objetivo de Banxico de recortar las tasas de interés, que actualmente se encuentran en un 11 %.
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Heath advierte sobre los riesgos de la inflación no subyacente y defiende mantener altas las tasas de interés. Analistas consultados por LPO destacan la dificultad de prever el impacto de la reforma en el tipo de cambio, pero señalan el movimiento del peso tras la victoria de Claudia Sheinbaum y Morena, cuando el peso pasó de 17 a 18.50 por dólar.
Iván Arias, analista de Citibanamex, enfatizó que el tipo de cambio también estará afectado por la volatilidad del proceso electoral en Estados Unidos.
Banxico monitoreó con preocupación el tipo de cambio en su última reunión de junio. No obstante, algunos dentro del banco central consideran que la desaceleración económica podría contrarrestar una posible apreciación de la moneda.
Las proyecciones de instituciones financieras como el FMI y Banxico revelan una desaceleración mayor a la esperada en la economía mexicana, con 17 meses de inflación subyacente a la baja.
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«La desaceleración de la economía podría amortiguar el efecto de un mayor tipo de cambio sobre la inflación», comentó Arias, alineándose con algunas opiniones del banco central. «Banxico debe ver el panorama inflacionario en su conjunto, no solo responder a eventos aislados», agregó el economista.
La volatilidad en el tipo de cambio limita a Banxico en su capacidad para reanudar el recorte de tasas de interés. Otro factor que podría aliviar la presión sobre Banxico son los posibles recortes de tasas por parte de la Reserva Federal (Fed). Según los últimos mensajes de Jerome Powell, se esperan dos recortes este año, lo que mantendría el diferencial de tasas con México y fortalecería la divisa mexicana.
En este contexto, a pesar de los episodios que podría enfrentar el peso en los próximos meses, los analistas predicen que la inflación rondará el 4 % para fin de año. Además, se proyectan cuatro recortes a la tasa de interés, dejándola en un 10 %, ante una menor actividad económica en el segundo semestre del año.
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