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La senadora Olga Sánchez Cordero, exministra de la Suprema Corte y militante de Morena, se encuentra en el centro de la controversia por su reciente ausencia en la votación de la Reforma Judicial impulsada por el presidente López Obrador. Esta reforma fue aprobada en la Cámara de Diputados con 359 votos a favor, cinco menos de la cantidad total de escaños que controla la alianza de la 4T.
La ausencia de Sánchez Cordero ha generado malestar entre algunos miembros de Morena, quienes cuestionan su lealtad al proyecto de la Cuarta Transformación. La exministra ha sido vista por algunos como una aliada de la oposición, lo que ha intensificado el descontento en su partido.
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Ricardo Monreal, líder de Morena en la Cámara de Diputados, fue consultado al respecto y respondió con frialdad. “Si está enferma, que se recupere. Si fue por decisión propia, es asunto de su conciencia”, comentó el legislador.
Sánchez Cordero justificó su ausencia argumentando problemas de salud. A través de redes sociales, explicó que se sintió mal el lunes y fue hospitalizada por recomendación de su cardiólogo. Cabe recordar que la senadora fue sometida a una cirugía de corazón abierto hace algún tiempo.
A pesar de su ausencia, la reforma fue aprobada sin dificultades, pues la votación no dependía de su presencia para alcanzar la mayoría calificada. Sin embargo, algunos dentro de Morena recuerdan las posturas críticas que la senadora ha expresado contra el proyecto presidencial. En junio, Sánchez Cordero señaló que no se puede permitir la llegada de personas sin experiencia al sistema judicial, exigiendo elegibilidad e idoneidad como requisitos clave.
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La controversia también gira en torno a su hija, Paula María García Villegas, quien podría verse afectada por la reforma al tener que someterse a una elección para mantener su puesto. Este vínculo familiar ha alimentado especulaciones sobre las verdaderas razones detrás de la ausencia de Sánchez Cordero.
Además, la amistad cercana entre la ministra Norma Piña y Sánchez Cordero ha levantado sospechas dentro de Morena, especialmente tras el apoyo público que la senadora brindó a Piña en su enfrentamiento con López Obrador. Estas conexiones siguen generando tensión en el partido.
Sánchez