Nacional
Redacción
Política Gurú
Javier May dejará FONATUR en septiembre para buscar la candidatura a gobernador en Tabasco. Según encuestas, es el favorito. Sin embargo, solo podrá entregar dos tramos del Tren Maya: el 1 y el 2.
Esta decisión ha sido respaldada por los generales Gustavo Vallejo y Fernando Cervantes, del Ejército. Vallejo busca que FONATUR tenga un rol administrativo, mientras el Ejército toma el control de las expropiaciones en los próximos tramos.
El hijo del presidente, Andrés López Beltrán, supervisa este proceso y actúa como intermediario entre May y la Sedena. Se rumorea que López Beltrán tiene intereses políticos propios hacia 2030.
Te puede interesar: Vuelve Daniel Ricciardo a F1; AlphaTauri despidió a De Vries
En Pemex, la oficina de Octavio Romero también alienta la carrera política de López Beltrán en Tabasco. Además, May se beneficia de los escándalos que han afectado a Adán Augusto López Hernández y limitado su capacidad para apoyar a su hermana como candidata a gobernadora.
Puntos clave:
- May deja un proyecto en curso para perseguir sus aspiraciones políticas, lo cual puede afectar la continuidad y la eficiencia de la construcción del Tren Maya.
- El control del Ejército en las expropiaciones puede generar polémica y levantar preocupaciones sobre la transparencia del proceso.
- El respaldo de Andrés López Beltrán y el impulso de su propia carrera política plantean interrogantes sobre la imparcialidad y el nepotismo en la toma de decisiones.
- Los escándalos que rodean a Adán Augusto López Hernández pueden debilitar el apoyo a su hermana como candidata y beneficiar a May en las elecciones.
Síguenos en LinkedIn para mantenerte siempre informado
La salida de Javier May del Tren Maya y su incursión en la política en Tabasco han generado expectativas y controversias, y el papel del Ejército y de López Beltrán en este proceso añade un componente adicional de intriga.
Tabasco
