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Redacción
Polítca Gurú
Ferrari, que debía rivalizar con Red Bull o asegurar el segundo puesto, ha quedado en cuarto lugar, sorprendiendo negativamente en la clasificación.
En el actual campeonato de Fórmula 1, Ferrari ha experimentado un declive significativo, alejándose de las expectativas que tenía sobre sus hombros. En lugar de mantener su posición como el segundo equipo más fuerte, la escudería italiana ha sufrido un retroceso notorio en sus aspiraciones, dando como resultado una desilusión generalizada.
La renombrada Escudería del Cavallino Rampante se ubica en el cuarto puesto del Campeonato Mundial de Constructores, acumulando apenas 191 puntos. Esta cifra palidece en comparación con los 503 puntos del líder, Red Bull, que ha dominado los 12 Grandes Premios de esta temporada.
Los pilotos de Ferrari, Charles Leclerc y Carlos Sainz, han sumado 99 y 92 puntos, respectivamente, colocándose en las posiciones quinta y séptima del Campeonato de Pilotos.
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En un sorprendente giro de los acontecimientos, Ferrari se ha visto superado no solo por Red Bull, sino también por Mercedes y Aston Martin. La escudería se encuentra en una lucha para mantenerse en la pelea por el tercer puesto, compitiendo directamente con el equipo dirigido por Lawrence Stroll, que ostenta una ventaja de 5 unidades.
A diferencia de la temporada anterior, donde Ferrari logró cuatro victorias y 11 podios en 12 Grandes Premios, el presente año ha sido marcado por una falta de desempeño. La escudería solo ha logrado subir al podio en tres ocasiones y ha estado lejos de la contienda por la victoria. Una situación desfavorable para una marca que históricamente se ha destacado por su papel protagónico en la competición.
El inicio de la temporada 2023 estuvo marcado por el anuncio de un cambio en la dirección. Frederick Vasseur asumió el cargo de director de equipo en reemplazo de Mattia Binotto, quien renunció después de cuatro temporadas. Sin embargo, este cambio no logró impulsar la escudería hacia un mejor desempeño.
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Los desafíos del SF-23 en cuanto a rendimiento y mejoras constantes han sido evidentes en esta temporada. A pesar de un comienzo prometedor en los entrenamientos y calificaciones, los domingos de carrera han sido difíciles para Ferrari, con estrategias fallidas y un ritmo que no se sostiene.
Vasseur señaló que los problemas de ritmo están relacionados con la aerodinámica del monoplaza. “El Ferrari es difícil de controlar. Puedes arriesgar en una vuelta rápida, pero en carrera, la estabilidad se reduce. Es un problema aerodinámico”, explicó a La Gazzetta dello Sport.
La esperanza radica en un posible repunte en el rendimiento, como se vio en Spa Francorchamps, donde Charles Leclerc logró un podio consistente. Ferrari aspira a acercarse a Mercedes y Aston Martin en la clasificación, aunque el cambio radical parece improbable en el corto plazo. La escudería ya está enfocada en la próxima temporada, buscando mejorar su posición y competir con rivales fuertes como McLaren, que ha demostrado un desarrollo impresionante en esta campaña.
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