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Redacción
Política Gurú
En la región de Los Altos de Jalisco, conformada por 20 municipios y destacada por la presencia de Lagos de Moreno, preocupa la alarmante cifra de 1,568 personas desaparecidas, según revelan datos del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas del gobierno federal. Esta cifra representa más del 10% de los 14,877 casos reportados en todo el estado.
Las estadísticas federales resaltan que Lagos de Moreno ocupa el octavo lugar en la lista de municipios con más desapariciones en el estado (404 denuncias), posicionándose tras las ciudades metropolitanas de Guadalajara (2,976 casos), Zapopan (2,368), Tlajomulco (1,351), Tlaquepaque (1,124), Tonalá (678), El Salto (583) y Puerto Vallarta (488).
Esta problemática se concentra en una región de gran complejidad geográfica, limitando con Zacatecas, Aguascalientes y Guanajuato. Aproximadamente, residen 1,213,000 personas en esta área, la cual, de acuerdo con el Sistema de Información sobre Víctimas de Desaparición del gobierno de Jalisco, figura como una de las más afectadas por este delito.
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Luego de Lagos de Moreno, Tepatitlán destaca como el segundo municipio con mayor cantidad de desapariciones, sumando 271 casos según informes del gobierno federal. Le siguen Encarnación de Díaz (199 casos), Arandas (156), San Miguel El Alto (104), San Juan de los Lagos (101), Jalostotitlán (64) y Teocaltiche (59).
En el resto de la región, los números de desapariciones son menores pero igualmente preocupantes: Ojuelos registra 41 casos, seguido por Yahualica (37), Acatic (28), San Julián (25), Jesús María (23), Unión de San Antonio (15), San Ignacio Cerro Gordo (14), San Diego de Alejandría (nueve), Villa Hidalgo (ocho), Valle de Guadalupe (cinco), Cañadas de Obregón (tres) y Mexticacán (dos), de acuerdo con cifras oficiales.
Raíces de un Problema Duradero
Desde el 27 de abril de 2015, Catalina Mireles emprende la búsqueda de su hija, Ana Elvira Castillo Mireles, desaparecida en la colonia San Miguel de Lagos de Moreno. El 18 de diciembre de 2022, en esa misma zona, su sobrino Arturo Mireles González también desapareció. La señora Mireles forma parte del colectivo Hasta Encontrarles de Lagos de Moreno y destaca que el problema persiste por años en la región, sosteniendo que muchas víctimas optan por no denunciar.
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A pesar de ello, las autoridades solían mostrar pasividad en este tema. Sin embargo, ante la desaparición de Roberto Olmeda Cuéllar, Diego Lara Santoyo, Uriel Galván, Jaime Martínez Miranda y Dante Cedillo Hernández, la situación ha cambiado, habiéndose desplegado operativos que han atraído la atención nacional.
La señora Mireles comenta: “Un despliegue así no se veía desde 2013, cuando desaparecieron siete muchachos, pero ahora que somos muchísimas las familias que tenemos personas desaparecidas (…) mucha gente ha levantado la voz y siento que es por eso que la fiscalía está aquí en Lagos buscándolos”.
Desafíos Continuos
A lo largo del tiempo, las autoridades estatales y federales han anunciado operativos conjuntos para reforzar la seguridad en la región, pero la violencia persiste. Solo en 2023, se han implementado tres despliegues para “reforzar la vigilancia” en la zona tras el asesinato de dos elementos de la Guardia Nacional el 23 de mayo. No obstante, sus resultados son efímeros. La preocupación por las desapariciones en Los Altos de Jalisco sigue en aumento, demandando acciones sólidas y a largo plazo para abordar este problema latente.
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