Internacional
El crecimiento de las energías limpias puede colaborar a contener el cambio climático, por ello es que a Estados Unidos preocupa la iniciativa de reforma energética del Presidente Andrés Manuel López Obrador, por considerar que va en sentido contrario.
El enviado especial del gobierno de Estados Unidos, para el clima, John Kerry, expresó al mandatario mexicano “importantes” inquietudes que existen en la administración Biden-Harris, sobre una reforma energética como la planteada.
A través de un comunicado difundido por la embajada de Estados Unidos en México, se dio a conocer que John Kerry expuso a Andrés Manuel López Obrador, lo imperativo que resulta impulsar economías abiertas y competitivas, ello en cumplimiento del T-MEC.
“Trabajando juntos, América del Norte puede convertirse en la principal economía de energía limpia en el mundo. En conversaciones con nuestros socios mexicanos, tuve oportunidad de compartir nuestras preocupaciones con la actual propuesta de reforma del sector energético, y de colaborar en una visión para el crecimiento de la energía renovable y el combate a la crisis climática”, declaró el funcionario estadounidense.
Por su parte, el embajador Ken Salazar, sugirió que América del Norte tiene la oportunidad de crear energías limpias y renovables.
“Tenemos una oportunidad histórica como región de crear energía limpia y renovable, que aporte la fuerza que nuestras economías requieren, mientras protege al medio ambiente. Nuestros países pueden ser los líderes de una revolución en energía limpia», indicó.
La representación diplomática estadounidense en México, detalló que durante el encuentro Kerry-López Obrador, se planteó que es posible expandir y acelerar la cooperación.
“Y abordaron la oportunidad de un rápido despliegue de energía renovable en México para impulsar la economía mexicana y del resto de América del Norte, al tiempo que se abaratan los costos de energía para los ciudadanos y empresas mexicanas, y se reduce la contaminación por carbono. México está dotado de un extraordinario potencial de energía renovable, y está bien posicionado para liderar el desarrollo de una economía basada en energía limpia”, difundió la embajada.
Detalló que en la reunión en Palacio Nacional se abordaron los siguientes pasos para implementar los compromisos climáticos y de energía limpia que Estados Unidos y México hicieron en la Declaración Conjunta de México y Estados Unidos sobre el cambio climático, de octubre de 2021; en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP 26) en Glasgow, Escocia, a principios de noviembre; y en la Cumbre de Líderes de América del Norte en Washington, DC, el 18 de noviembre.
También hablaron sobre la urgencia de acelerar los esfuerzos nacionales y globales para limitar el calentamiento a 1.5 grados centígrados.
“Ambos países compartieron la opinión de que la década de 2020 es decisiva para la acción climática, como se afirmó en la COP 26, y buscan tomar medidas decisivas para implementar políticas a fin de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en todos los sectores, en especial acelerando significativamente el despliegue de energía renovable”, se mencionó en el comunicado.
Ambas partes acordaron que pondrán en acción un diálogo de alto nivel sobre la implementación de metas, mediante la formación de un Grupo de Trabajo Estados Unidos-México para el Clima y la Energía Limpia, que incluirá dependencias claves en ambos lados. Las áreas de enfoque de las políticas incluirán: la aceleración del desarrollo de energías renovables, incluyendo cadenas de suministro solar; el control de las emisiones de metano provenientes del combustóleo y el gas, los desechos y la agricultura; la reducción de emisiones del transporte mediante la electrificación y otras estrategias; la eliminación de la deforestación; el apoyo a soluciones basadas en la naturaleza, y contribuciones determinadas nacionalmente (NDCs, por sus siglas en inglés).
Se informó que los dos países iniciarán intercambios en políticas y técnicas en sus respectivas metas para 2030, y en el desarrollo de las contribuciones determinadas nacionalmente por parte de México. Ambas partes también acordaron reunirse en los próximos 30 días para considerar oportunidades de mejorar el despliegue de energías limpias.
Por su parte, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) difundió una comunicación en la cual subrayó que en el encuentro de autoridades mexicanas con Kerry, el presidente Andrés Manuel López Obrador enfatizó que la prioridad de su administración es acabar con la corrupción en el país.
“Ante esto, destacó la imperiosa necesidad de modificar el actual esquema eléctrico en México dado su alto costo fiscal, aclarando que la decisión al respecto corresponderá al Congreso mexicano.
“El primer mandatario entabló diálogo con la delegación estadounidense reconociendo la importancia de avanzar juntos en el despliegue de energías limpias, y reconoció la posición expresada por el enviado especial John Kerry acerca de que el respeto a la soberanía nacional es la base de la actual exitosa relación bilateral”, difundió la cancillería mexicana.
