Nacional
Redacción
Política Gurú
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ha otorgado contratos valuados en más de mil 100 millones de pesos a una empresa bajo escrutinio, acusada de operar con direcciones ficticias y enfrentar cuestionamientos de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) sobre la idoneidad de sus servicios y tarifas.
La ASF incluso ha puesto en duda la necesidad de los «servicios informáticos» contratados por el líder del IMSS, Zoé Robledo. La entidad en cuestión, denominada Grupo PM Soluciones y PM Soluciones, no está registrada en el Registro Público de Comercio y ha proporcionado direcciones inconsistentes en diferentes contratos, sin ninguna evidencia de actividad comercial genuina.
Un caso ilustrativo es el registro de su sede en una casa de alquiler en Félix Parra 175, Colonia San José Insurgentes, y en Manuel M. Ponce 87, Piso 4, Colonia Guadalupe Inn, donde un empleado de seguridad confirmó que el piso estaba desocupado.
La directora ejecutiva, Marisol González Lozano, cambió su domicilio desde el modesto barrio de Popotla a Lomas de Chapultepec. La empresa ha sido contratada por el IMSS hasta 2024 para servicios informáticos profesionales y desarrollo de software.
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El primer contrato, S1M0293, firmado en octubre de 2021 por 245.5 millones de pesos, fue seguido por otros tres contratos por 858 millones de pesos en tan solo seis días a finales de 2022.
Un informe de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) sobre contratos del sector público señala al IMSS como uno de los mayores otorgantes de contratos sin competencia a empresas de reciente creación o con domicilios inciertos. El Instituto ha gastado un 45% de su presupuesto en compras sin competencia, superando los 70 mil millones de pesos.
La empresa es representada por Rafael Martínez Carreón en este caso, quien ha empleado diferentes direcciones en licitaciones o contratos. Grupo PM ha estado envuelto en otros escándalos, incluido un contrato por «Servicios Tecnológicos» a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), en el que se detectaron subcontrataciones y equipo faltante.
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La ASF ya ha recomendado al IMSS investigar y sancionar a los involucrados debido a la falta de evidencia de ejecución de los servicios contratados.
La empresa Process, Management and Solutions obtuvo su primer contrato después de ocho años, mientras que People Media recibió contratos con cuestionamientos sobre su ubicación y operaciones. La llegada de Zoé Robledo al IMSS resultó en favorecimiento a People Media, a pesar de preocupaciones previas.
En conclusión, el IMSS ha otorgado millonarios contratos a empresas con cuestionamientos sobre su legalidad y operaciones, planteando interrogantes sobre la transparencia en el proceso de licitación y la utilización de fondos públicos.
IMSS
