Nacional
Redacción
Política Gurú
El presidente Andrés Manuel López Obrador lanzó un desafío audaz contra las afirmaciones de injerencia estadounidense, negando rotundamente los reportajes del New York Times sobre supuestos vínculos entre sus aliados y los cárteles de droga. Exigió a Estados Unidos claridad sobre las investigaciones, cuestionando la autoridad de un país para intervenir en los asuntos internos de otro. Su llamado a la transparencia resonó como un eco de desafío a los principios de un gobierno democrático.
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La respuesta de la Casa Blanca, a través del portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, fue tajante: negó la existencia de cualquier investigación dirigida hacia López Obrador o su administración. Esta negativa, sin embargo, no hizo más que añadir leña al fuego del debate sobre la intervención y soberanía nacional.
Por otro lado, The New York Times contraatacó, criticando la táctica de AMLO de revelar información personal de una de sus periodistas, calificándola de preocupante e inaceptable en un tiempo donde la seguridad de los periodistas está cada vez más amenazada. Esta acción por parte del mandatario mexicano fue recibida con una investigación por parte del INAI debido a la exposición del número telefónico de la periodista.
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Esta serie de eventos pone de manifiesto no solo las tensiones entre México y Estados Unidos sino también el delicado equilibrio entre la libertad de prensa y la seguridad de los periodistas, en un mundo donde las líneas entre la política y la información se entrelazan cada vez más.
López Obrador
