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El destino del Super Bowl LVIII tomó un giro inesperado debido a un error crítico de Jake Moody de los 49 ers. Un punto extra no convertido alteró el curso del partido, facilitando a los Chiefs un empate agónico de 19-19, gracias a un gol de campo que los llevó a tiempo extra. En un desenlace electrizante, Patrick Mahomes y su equipo emergieron como bicampeones, dejando a San Francisco en la estela de su triunfo.
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Los Chiefs, liderados por un Mahomes inspirado, revirtieron una desventaja de 10 puntos. En tiempo extra, conquistaron la victoria por 25-22. Este logro, ante más de 61,000 espectadores en Las Vegas, marca el primer bicampeonato en 19 años. Mahomes, con 333 yardas aéreas, dos touchdowns y una crucial carrera de 66 yardas, se coronó MVP del Super Bowl por tercera vez.
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En un momento decisivo, un pase de Mahomes a Mecole Hardman volteó el marcador. Los 49ers, limitados a un gol de campo en el tiempo extra, no pudieron avanzar más allá de la yarda 9 del adversario. El estadio estalló en júbilo, especialmente cuando Travis Kelce proclamó su amor por Las Vegas al concluir el partido.
La presencia de Taylor Swift, novia de Kelce, quien viajó desde Tokio, añadió glamour a la victoria de los Chiefs, cimentando aún más su legado como una dinastía en la NFL.
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